La escala de calificaciones que ofrecen los boletines, que ya está vigente, apunta a enfatizar el progreso del alumno.

Por la Mgter. Vanesa Aichino (*)

El presente ciclo lectivo se inició con un nuevo diseño curricular para cerrar una etapa de más de dos décadas del anterior. Asimismo, se implementó el nuevo Reglamento Escolar y para el nivel primario, por primera vez, se incorporó un Régimen Académico. El Reglamento anterior indicaba las normas de funcionamiento de las instituciones y las obligaciones y prohibiciones de los equipos directivos y docentes. En el actual hay una mirada hacia lo pedagógico incorporando también a las familias como parte de la comunidad educativa. Los tres documentos mencionados han sido confeccionados en consonancia. Ante un programa de contenidos nuevo, pensado y redactado con otro paradigma, con objetivos distintos, que requiere de estrategias de enseñanza diferentes, con una mirada hacia otro horizonte, surgió la necesidad de un cambio en los boletines ¿Se podría calificar lo nuevo con un instrumento anterior pensado con otros propósitos y un marco teórico distinto? Obviamente la respuesta es no.

El Ministerio de Educación de la Ciudad de Buenos Aires recientemente dio a conocer la modificación del sistema de calificación en las escuelas primarias de gestión estatal y privada. El cambio afecta a todos los estudiantes de primero a séptimo grado, quienes recibirán boletines con una nueva escala de progreso que reemplaza a las notas conceptuales tradicionales. Las calificaciones numéricas continuarán utilizándose a partir de cuarto grado, junto con la nueva escala. Como se mencionó anteriormente, la medida forma parte del nuevo Régimen Académico que fue aprobado por resolución ministerial y está vigente desde este ciclo lectivo. El nuevo instrumento es más reducido y amigable desde lo visual.

La nueva escala de calificaciones enfatiza el progreso y se establecen cinco niveles: destacado, avanzado, alcanzado, en proceso y no alcanzó los objetivos. Estas calificaciones reemplazan a las categorías tradicionales de evaluación que se utilizaban hasta el ciclo lectivo 2024: sobresaliente, muy bueno, bueno, regular e insuficiente (de 1° a 6° grado) y numérica en 7° grado. ¿A qué hace referencia cada nivel de la escala de proceso? “Destacado” quiere decir que aprendió e integró todos los contenidos esperados y demuestra el aprendizaje afianzado de forma sobresaliente. “Avanzado” significa que aprendió e integró muy bien los contenidos y demuestra el aprendizaje consolidado de manera satisfactoria. Por “Alcanzado” se entiende que logró apropiarse de los contenidos, logrando los aprendizajes previstos de manera satisfactoria. Cuando hablamos de “En proceso” se hace referencia a que aprendió algunos contenidos esenciales, pero necesita más tiempo y apoyo para seguir avanzando. Por último, en relación con “No alcanzó los objetivos”, se entiende que todavía no logró aprender los contenidos esenciales, necesita un acompañamiento más específico, individualizado, por un tiempo mayor y, de ser necesario, realizar las adecuaciones pertinentes de contenidos que sean puentes para que se adquieran los aprendizajes.

En las escuelas de gestión estatal la carga de los boletines se realiza a través de la Plataforma Aprende BA. Las familias tienen un código que deben solicitar al equipo directivo de cada escuela para poder visualizar el documento de calificación. Este código

se mantiene durante toda la trayectoria primaria del estudiante, aunque cambie de escuela. Para los docentes es un desafío, ya que deben pensar muy bien qué colocar en cada indicador o criterio (fila) pensando en los niveles de logro (columnas) ya que el sistema arroja la nota definitiva en base a lo cargado. La mirada está puesta en mostrar con mayor precisión el nivel de desempeño alcanzado por cada alumno y, como en toda evaluación, orientar la planificación pedagógica, la labor docente, a partir de trayectoria, de sus avances, o dificultades.

En el primer ciclo (de 1° a 3er. grado) se utiliza la escala de progreso que muestra cómo avanza cada niño y niña en su proceso de aprendizaje. En el segundo ciclo (de 4° a 7°) se combinan las calificaciones numéricas (1 a 10) con la escala de progreso. A modo de ejemplo, un estudiante con un desempeño “en proceso” recibirá una nota numérica que puede ser 4 o 5 ¿Con qué calificación se aprueba el grado? Recordemos que 1° y 2° grado conforman una unidad pedagógica. De 2° a 6° grado es necesario alcanzar un 4 o más para promocionar el año. Para 7° grado se requerirá al menos un 6.

Estos cambios ya se implementan para la confección de los boletines del primer bimestre que las familias recibirán en mayo. Los docentes pueden realizar la carga hasta el 23 de este mes. Para confeccionarlos, los criterios de evaluación muestran los aprendizajes que se esperan que los alumnos logren durante el grado y en cada una de las áreas del conocimiento, ya no por ciclo, como ocurría anteriormente. Los indicadores están alineados con los nuevos objetivos de aprendizaje del diseño curricular.

¿Qué sucede si mi hijo no logró un “Alcanzado” (un 4)? Para aquellos alumnos que presentan mayores dificultades, tal como lo indica la normativa, se contará con dispositivos de acompañamiento específico para que alcancen los aprendizajes prioritarios en cada área y grado. La Agenda Educativa establece los distintos períodos de acompañamiento para la promoción. Si tras haber participado en estas instancias, el estudiante continúa con calificación “En proceso” o “No alcanzó los objetivos” en lengua y matemática, el equipo directivo -con acuerdo de la supervisión- realizando una evaluación integral que abarque múltiples variables, puede considerar que es conveniente que el niño o niña permanezca en el mismo grado para consolidar sus aprendizajes. En todos los casos, se notificará previamente a la familia, labrándose las actas pertinentes y se elaborará un plan de intervención específico que registre los logros alcanzados y oriente las acciones para seguir acompañando la trayectoria educativa del estudiante.

La Plataforma Aprende BA permite por parte de las escuelas la elaboración de informes valorativos de aprendizajes para compartir con las familias al final del segundo y cuarto bimestre. No son obligatorios, la decisión de confeccionarlos está a cargo del equipo directivo junto a la supervisión. Estos informes deben construirse de forma conjunta entre todos los docentes a cargo del estudiante y deben incluir aspectos como la participación, el compromiso con el aprendizaje, las fortalezas del estudiante y las áreas que requieren refuerzo.

Recordemos que los boletines muestran el progreso de cada estudiante a lo largo del año, bimestre a bimestre, para ver mejor sus avances. También explican claramente qué se evalúa en cada materia, para que las familias puedan acompañar desde casa. La calificación es un momento de la evaluación, el boletín debe ser una herramienta para ayudar a los estudiantes a aprender.

(*) Aichino es licenciada y magister en Educación, Supervisora Escolar del D.E. 13 y vecina de Liniers.